Cómo resistirme a escribir algo sobre esta desternillante serie inglesa si llevo días y días repitiendo sus frases y partiéndome como la primera vez. Os la recomiendo enormemente. Se trata de una serie sobre dos frikis informáticos que trabajan en el cutre-departamento de mantenimiento de equipos informáticos de las Industrias Reynholm.
Tranquilos, no vais a experimentar una sarta de tecnicismos o un humor basado en el sector informático, sino más bien un montón de situaciones surrealistas, personajes con un caracter único y un humor fresco y diferente. Moss (foto) es el personaje principal, y vive en casa de su madre. Ella le peina y le viste. Tiene que llevar siempre encima un spray para que no se le caliente demasiado el oído. Es muy inteligente, a la par que inocente, y no sabe mentir. Es el personaje más destacado, pero la serie tampoco es nada sin Roy (su compañero de departamento), Jen (jefa del departamento) y Denholm (presidente de las Industrias Reynholm).
Sometimes I feel Like I don't have a partner. Sometimes I feel Like my only friend Is the city I live in The city of angel. Lonely as I am Together we cry.
I drive on her streets 'Cause she's my companion. I walk through her hills 'Cause she knows who I am. She sees my good deeds And she kisses me windy. I never worry. Now that is a lie.
I don't ever want to feel Like I did that day. Take me to the place I love Take me all the way.
It's hard to believe That there's nobody out there. It's hard to believe That I'm all alone. At least I have her love. The city she loves me. Lonely as I am Together we cry.
I don't ever want to feel Like I did that day. Take me to the place I love Take me all the way.
Under the bridge downtown Is where I drew some blood. Under the bridge downtown I could not get enough. Under the bridge downtown Forgot about my love. Under the bridge downtown I gave my life away.
He aquí los árboles del futuro. Diseñados por Klaus Lackner (físico de la Universidad de Columbia), son mil veces más potentes que los árboles naturales a la hora de absorber CO2. En un año, podrían absorber el equivalente a las emisiones de 15.000 vehículos, o lo que es lo mismo, 90.000 toneladas de dióxido de carbono.
Algunos ingenieros aseguran que el proyecto no es viable, porque gastan más energía que el CO2 que recuperarían.
En cualquier caso, la cuenta atrás sigue su curso.